Descripción

A lo largo de las páginas de la obra He aquí la esclava del señor estructurada en tres capítulos titulados ‘De niña, a mujer…de su casa’, ‘De profesión, sus labores’ y ‘El cuerpo del delito’, veremos cómo, desde su más tierna infancia las que hoy son nuestras madres, nuestras hermanas o nuestras esposas, fueron educadas para parir y cuidar cuantos hijos Dios les diera y servir al marido con entrega total, dedicándose a las labores propias de su sexo como el cuidado de la casa, de los niños y el marido. El autor también retrata en clave de humor el tratamiento que recibían las mujeres que se dedicaban a labores impropias de su sexo (como trabajar fuera de casa) o que se daban en exceso al deporte de la seducción amorosa.

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